Lunes 20 de Diciembre de 2010 09:28 Redaccion
El Debate de los calentanos. 20/12/10
La bancada de “izquierda” en el Congreso se lanza en un claro madruguete a la campaña del candidato de la coalición “Tiempos Mejores para Guerrero”, Manuel Añorve Baños: la idea es amarrar el presupuesto de 2011 y matar las promesas del priista para regalar fertilizante y eliminar la tenencia automotriz.
El lance no puede ser una estrategia poco planeada, sino que va bien ajustada en apoyo al candidato de “Guerrero nos Une”, Ángel Aguirre Rivero, aunque también preventiva hacia su propia figura, y pensada incluso tomando en cuenta el costo político que podría implicar en su campaña, en tanto que es sencillo relacionarlas, porque una propuesta como esa, planteada el 18 día pasado en el Congreso, puede ser totalmente antipopular.
También tiene el sesgo antifigueroísta, porque rompería la eventual posibilidad de un presunto negocio implicado en la promesa añorvista de beneficiar con la compra del fertilizante a una empresa supuestamente propiedad del ex gobernador, Rubén Figueroa Alcocer.
Los argumentos expuestos por el diputado presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Carlos Álvarez Reyes, tienen lógica y se basan en cuestiones de interés público, eso es un hecho, pero no dejarían por ello de tener su razón electoral, de hecho, aunque en parte lo niega, lo deja ver, y aun cuando no fuese así, es evidente.
Habla de continuidad de los programas de Gobierno, de no dejarle las manos libres al cierre del ejercicio al mandatario Zeferino Torreblanca Galindo y de hacer una planeación responsable del gasto de los guerrerenses, todo lo cual es loable en tanto que es la obligación del Poder Legislativo: acotar al Ejecutivo si es necesario, en bien de la sociedad en su conjunto.
La realidad, o al menos lo que puede deducirse, es que están acotando más bien a quien tome posesión de Casa Guerrero el próximo año, pero más enfáticamente están inutilizándole las fichas al juego de Manuel Añorve Baños.
Vamos, si la campaña para descalificar la promesa del fertilizante totalmente gratuito en todos los municipios del estado no había funcionado bien, esta otra medida es certeramente más efectiva.
Lo es porque, reiterando, da el golpe en el escenario actual de las campañas y al mismo tiempo da uno futuro, en el eventual caso de que el alcalde con licencia de Acapulco llegara a ganar la contienda que cierra con los comicios del 30 de enero de 2011. ¿Es que acaso los perredistas ya están viendo una posible derrota?
Más allá de ello, la postura de la bancada de izquierda en el Legislativo Estatal se previene contra cualquier postura que Ángel Aguirre Rivero pudiese tomar de ganar la elección, generándole la necesidad de mantenerse siempre en la negociación con quienes ahora sustentan su campaña.
Lo preventivo pareciese decir que los perredistas y el resto de los diputados que apoyan la propuesta de etiquetar firmemente el presupuesto de 2011 pensarían algo así como: un expriísta será siempre un priísta. Mejor acotar de una vez a Aguirre Rivero, no vaya a pasarles lo que a los panistas en Sinaloa con el caso de Mario López Valdez, que una vez elegido dijo que él a lo suyo y con los suyos, haciendo a un lado a muchos panistas que ya se hacían como parte del equipo de Gobierno.
Lo interesante del asunto es que pese a todo lo expuesto antes, el diputado Álvarez Reyes diga con toda soltura que “en el Congreso del estado estamos haciendo un trabajo muy responsable, al margen de las campañas políticas”. Sí, se nota.
El lance no puede ser una estrategia poco planeada, sino que va bien ajustada en apoyo al candidato de “Guerrero nos Une”, Ángel Aguirre Rivero, aunque también preventiva hacia su propia figura, y pensada incluso tomando en cuenta el costo político que podría implicar en su campaña, en tanto que es sencillo relacionarlas, porque una propuesta como esa, planteada el 18 día pasado en el Congreso, puede ser totalmente antipopular.
También tiene el sesgo antifigueroísta, porque rompería la eventual posibilidad de un presunto negocio implicado en la promesa añorvista de beneficiar con la compra del fertilizante a una empresa supuestamente propiedad del ex gobernador, Rubén Figueroa Alcocer.
Los argumentos expuestos por el diputado presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Carlos Álvarez Reyes, tienen lógica y se basan en cuestiones de interés público, eso es un hecho, pero no dejarían por ello de tener su razón electoral, de hecho, aunque en parte lo niega, lo deja ver, y aun cuando no fuese así, es evidente.
Habla de continuidad de los programas de Gobierno, de no dejarle las manos libres al cierre del ejercicio al mandatario Zeferino Torreblanca Galindo y de hacer una planeación responsable del gasto de los guerrerenses, todo lo cual es loable en tanto que es la obligación del Poder Legislativo: acotar al Ejecutivo si es necesario, en bien de la sociedad en su conjunto.
La realidad, o al menos lo que puede deducirse, es que están acotando más bien a quien tome posesión de Casa Guerrero el próximo año, pero más enfáticamente están inutilizándole las fichas al juego de Manuel Añorve Baños.
Vamos, si la campaña para descalificar la promesa del fertilizante totalmente gratuito en todos los municipios del estado no había funcionado bien, esta otra medida es certeramente más efectiva.
Lo es porque, reiterando, da el golpe en el escenario actual de las campañas y al mismo tiempo da uno futuro, en el eventual caso de que el alcalde con licencia de Acapulco llegara a ganar la contienda que cierra con los comicios del 30 de enero de 2011. ¿Es que acaso los perredistas ya están viendo una posible derrota?
Más allá de ello, la postura de la bancada de izquierda en el Legislativo Estatal se previene contra cualquier postura que Ángel Aguirre Rivero pudiese tomar de ganar la elección, generándole la necesidad de mantenerse siempre en la negociación con quienes ahora sustentan su campaña.
Lo preventivo pareciese decir que los perredistas y el resto de los diputados que apoyan la propuesta de etiquetar firmemente el presupuesto de 2011 pensarían algo así como: un expriísta será siempre un priísta. Mejor acotar de una vez a Aguirre Rivero, no vaya a pasarles lo que a los panistas en Sinaloa con el caso de Mario López Valdez, que una vez elegido dijo que él a lo suyo y con los suyos, haciendo a un lado a muchos panistas que ya se hacían como parte del equipo de Gobierno.
Lo interesante del asunto es que pese a todo lo expuesto antes, el diputado Álvarez Reyes diga con toda soltura que “en el Congreso del estado estamos haciendo un trabajo muy responsable, al margen de las campañas políticas”. Sí, se nota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario