Lectura política

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Por: Noé Mondragón Norato

El factor Moreno Peña en la campaña priísta

El escándalo en torno al ex gobernador de Colima, Fernando Moreno Peña, crece como bola de nieve. Más aún, porque es el actual delegado del CEN del PRI para la elección de gobernador aquí. Y daña en consecuencia, la campaña del candidato tricolor, Manuel Añorve Baños. Se parte de un punto: Moreno Peña no puede eludir el señalamiento directo hecho por Idalia González Pimentel, la esposa del ex gobernador de Colima, Silverio Cavazos Ceballos, asesinado el pasado domingo. La viuda lo acusó de ser uno de los principales detractores de su esposo. Señal clara de involucrar el crimen en el contexto político. Y hay situaciones que reforzarían esta vertiente.

PRI: PUGNAS CON OLOR A MUERTE.- El estado de Colima ha sido tradicionalmente, un bastión priísta. Y una entidad que se quedó en medio del fuego cruzado por la inevitable irrupción del narcotráfico proveniente de dos demarcaciones vecinas: Jalisco y Michoacán. En esta coyuntura arribó como gobernador de aquella entidad, Silverio Cavazos Ceballos, en sustitución de Gustavo Vázquez Montes, quien falleció el un accidente aéreo el 24 de febrero de 2005 en Tzitzio, Michoacán. Desde entonces, los antecedentes negativos de Fernando Moreno Peña, comenzaron a manifestarse abiertamente, pues en su calidad de gobernador colimense, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación encontró pruebas que lo señalaban de intervenir en la elección que favoreció a Vázquez Montes. El proceso electoral se repuso. Y el extinto gobernador volvió a ganar. Un año y un mes duró en el cargo. La muerte lo esperaba Tzitzio. A su deceso, el Congreso local de Colima nombró a Arnoldo Ochoa González –cuadro político de Moreno Peña- como gobernador interino. Su misión consistió en emitir la convocatoria para una elección extraordinaria de gobernador. Es ahí donde apareció el nombre de Silverio Cavazos Ceballos, quien se alzó con el triunfo sobre el panista alcalde de Colima, Leoncio Morán Sánchez. Y comenzó a tener problemas visibles con el ex gobernador, y hoy delegado priísta en Guerrero. Cavazos le arrebató importantes ínsulas de poder. La más visible y estratégica fue la Universidad de Colima. Y luego, la sucesión gubernamental durante la elección del 2009: Cavazos impulsó decididamente al alcalde de Colima y actual gobernador, Mario Anguiano Moreno. Y Moreno Peña lo hizo a su vez con el ex gobernador interino Arnaldo Ochoa González. Si en el 2004 las cosas se le dieron con el extinto gobernador, Gustavo Vázquez Montes, esta vez perdió. Y desde luego, fue excluido del gabinete estatal actual. Todo, dentro de la caliente y sangrienta disputa territorial librada por los cárteles de la droga y entre mutuas acusaciones políticas de los actores priístas en aquellos lares, de pertenecer a una de esas organizaciones criminales. Lo cierto es que el crimen de Cavazos Ceballos ocurre en una entidad priísta y gobernada por priístas. Y en esa lógica, el primer responsable de aclararlo es el propio gobernador de la entidad. Y si no lo hizo, por lo menos dio una pista: pidió investigar a Fernando Moreno Peña y al diputado local de Colima, Nicolás Contreras Cortés, quienes acusaron recurrentemente al extinto Cavazos, de enriquecimiento ilícito. Lo cual revela el nivel de la pugna política priísta en aquella entidad. Como sea, el crimen de Cavazos le mete mucho ruido a Fernando Moreno Peña, para su actual y estratégica enmienda en Guerrero. Porque si viene de perder la elección presidencial del 2006 como uno de los coordinadores de campaña de Roberto Madrazo, y luego Colima en la elección de 2009, los coletazos de esa mala racha lo estarían alcanzando en Guerrero. De eso no hay ninguna duda.

HOJEADAS DE PÁGINAS…Una duda carcome en el PRD: si la hija del ex diputado local y ex dirigente estatal perredista, René Lobato Ramírez, ya dio sus apoyos públicos al candidato del PRI, entonces el claro que el propio miembro de la tribu Polo Guerrerense de Izquierda, lo está haciendo soterradamente. Para apostar en ambos lados y al final de la elección, caer parado con cualquiera de los candidatos que gane. Y en esa misma ruta parece moverse el propio senador del sol azteca, David Jiménez Rumbo, pues es vox populi que mantiene ciertos carros recolectores de basura trabajando en la comuna acapulqueña. Los dobleces políticos y las felonías se encuentran infiltrados en las campañas tanto de Ángel Aguirre, como de Añorve. El nivel de la suciedad es alto.