EDITORIAL

EDITORIAL

Acuerdo por la paz
El candidato de la coalición Guerrero nos une, Ángel Aguirre Rivero, lanzó ayer en Chilpancingo una iniciativa política para suscribir un pacto que garantice la paz y evite la violencia en este proceso electoral, y al hacerlo, se refirió a hechos preocupantes, como el secuestro del ex rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, Arturo Contreras Gómez.

El tema es delicado e importante, sin lugar a dudas, y es destacable que lo asuma un candidato a gobernador pues se entiende que en el caso de que ganara la elección se ocuparía en particular de buscar mecanismos que promuevan la paz y disuadan la violencia.

Aguirre Rivero extendió su propuesta no sólo a los otros dos personajes que contienden por la gubernatura, el priísta Manuel Añorve Baños y el panista Marcos Efrén Parra Gómez, sino a otros actores que no están inmersos en el proceso electoral, como representantes de las iglesias, el sector privado, y la sociedad en general, a partir de que el fenómeno es competencia e interés de todos los ciudadanos.

Propuso Aguirre: “garantizar la paz, evitar la violencia y sea un proceso (electoral) civilizado, un proceso donde todos no esforcemos a no violentar la ley, porque hay hechos que ya se empiezan a dar, como los que acaban de referir (el secuestro de Contreras Gómez), que de verdad son muy tristes y condenables, que si no atacamos a tiempo toda posible embestida de violencia, creo que todos vamos a lamentar esta situación”.

El tema de la violencia en general tiene en ascuas a toda la población y al revés, la paz y la tranquilidad se miran como algo deseable. Pero el asunto empieza a enredarse cuando el propio candidato, que convoca a toda la población y a los sectores, lo constriñe sólo al proceso electoral, como en el párrafo que se apunta arriba. Luego, pues, hay que definir a qué exactamente se está refiriendo el abanderado de Guerrero nos une.

Bien el llamado, bien que participen todos, incluidos los aspirantes a la gubernatura, sólo hay que definir los alcances y los términos: qué puede aportar cada quién, y en dónde y, también, con qué resultados. La voluntad, al final de cuentas, aquí también cuenta.